29 mayo 2006

EL MARKETING INMOBILIARIO Y EL KARAOKE

Noticia extraida de Expansión, jueves 25 de mayo de 2006
Autor: Santiago Iglesias

EL MARKETING INMOBILIARIO Y EL KARAOKE

Que desde hace varios años el sector inmobiliario en general, y las empresas que en operan en particular, están viviendo uno de sus momentos mas dulces ya no es noticia desde ninguna perspectiva.

Los promotores inmobiliarios han diversificado y aumentado sus actuaciones tanto como han podido, hasta el punto que es difícil reconocer quien hace que o mejor quien no lo hace. Las agencias inmobiliarias, por su parte, han proliferado en demasía. Tanto que hace unos días leía que en Madrid, por ejemplo, las agencias inmobiliarias registradas han pasado de de 3.000 a 30.000 en sólo 5 años.

Unos y otros han priorizado sus esfuerzos a la vertiginosa dinámica de las operaciones, relegando a un segundo plano la estrategia, y por tanto, la diferenciación de sus productos o servicios. Ellos han sido los artistas principales de este éxito musical.

En cambio, la buena salud del sector habría que medirla no sólo por los altos precios, los acelerados ritmos de ventas o el vertiginoso crecimiento de las compañías inmobiliarias. Otras mediciones menos superficiales, como la competitividad, la satisfacción de sus clientes o la madurez de las estrategias empresariales utilizadas, entre ellas, las del marketing, denotarán también en que medida este sector ha progresado por sí mismo, nos aproximarán su estabilidad y no reducirán su éxito o fracaso sólo en función del oportunismo del ladrillo. De esta manera sabremos si nos encontramos ante un éxito o ante la canción del verano.

Terminaremos un ciclo alcista (seguro que el ciclo inmobiliario cambiará su tendencia en algún momento) diferente a otros ya vividos. Ahora el cliente está mucho más informado que antes, el sector ha avanzado en su profesionalización e internacionalización y las tecnologías ofrecen un amplio abanico para contactar con los clientes.

Estrategias básicas

Un adecuado servicio post-venta (preocupación por la satisfacción del cliente); un exhaustivo conocimiento del cliente (soluciones CRM, targeting, clustering….); un enriquecimiento de la información geográfica (sistemas de marketing geográfico GIS); el e-marketing (e-posicionamiento, e-fidelización….); el móvil marketing (aplicaciones móviles en PDA, tecnología 3G..), son estrategias básicas para la identificación y el conocimiento de la demanda. Sin embrago en pocas compañías han adoptado alguna de ellas, salvo por imitación de su competencia.
Es paradójico observar como uno de los sectores más potentes de nuestra economía es también un sector que tarda en incorporar las nuevas tecnologías y uno de los últimos en utilizar las nuevas herramientas de marketing.

Aplicarlas es el eje vertebral de la diferenciación de las empresas con vocación de liderazgo, a la vez que garantiza la continuidad empresarial. No hacerlo es permanecer peligrosamente en el anonimato percibido por el cliente. Estas estrategias de marketing, junto con los valores de la compañía, son tan importantes como los productos que promueve o los servicios que ofrece.


Por ello, las empresas necesitan encontrar una identidad propia, que permita una diferenciación líder y contar, siempre, con una aplicación práctica posible. Si los valores se acompañan de creatividad y emotividad, ya que el 90% de las decisiones que tomamos en la vida son pura emotividad, nuestro modelo de negocio tendrá personalidad propia. El modelo de empresa Karaoke ( en esencia el karoke consiste en imitar a los artistas verdaderos) está acabando.

No hay comentarios: